Healings of sinusitis
Curación del daño de los senos frontales y maxilares
Sr. W.B. (49), Meschede (Alemania)
Desde hacía más de 20 años, yo había padecido de supuraciones de los senos frontales y maxilares. Un mejoramiento parcial se lograba con lavados y una operación de los senos maxilares, en el año 1968 y una operación del tabique nasal en el año 1977, con la excisión de la parte final del cornete nasal. Con todo ésto se lograba un mejoramiento parcial y reducido en el tiempo. Además, se me tenían que extirpar los pólipos nasales, los cuales siempre volvían a crecer. Cuando me limpiaba la nariz, salía pus y sangre. Los dolores de cabeza y la pérdida de sangre, eran mis compañeros inseparables. Respirar a través de la nariz, era prácticamente imposible. Cuando el tiempo estaba húmedo esta situación era un poco mejor. Consideraba como un mal menor el tomar pastillas antes de ir al trabajo.
Desde mi introducción a las enseñanzas de Bruno Gröning, en agosto de 1985, ya no he sufrido más de dolores de cabeza, la nariz no ha sangrado nunca más y puedo respirar a través de la naríz. Los pólipos nasales han desaparecido. Un control médico certificó que, los senos nasales, frontales y maxilares están perfectamente sanos.
Curación del daño de los senos frontales
Sr. H.R. (68) Wegberg (Alemania)
Desde 1952, yo padecía de dolores de cabeza recurrentes, de una sensación de presión en la zona frontal y así como también de resfríos. Debido a que las terapias a base de medicamentos no ayudaban mucho, me fueron ordenados lavados, los cuales eran muy dolorosos. Hasta el año 1986, se me hacían dos lavados por año de los senos frontales. Mi médico, decía que era una supuración crónica de los senos frontales y opinó que yo tendría que acostumbrarme a vivir con ella. De vez en cuando, yo tenía una pausa de medio año, pero después de la misma, los sufrimientos reaparecían.
Desde la introducción a las enseñanzas de Bruno Gröning, en el mes de noviembre de 1987, yo no he padecido ninguna afección más. Puedo respirar a través de la nariz. La afección crónica de los senos frontales ha desaparecido y no necesito más de medicamentos ni de lavados.
Curación del daño de los senos frontales
Sr. L.N. (32) Kerkrade (Países Bajos)
Desde 1986, según lo díagnosticado por mi médico, yo padecía de una afección crónica de los senos frontales. Durante las horas nocturnas, yo sufría de problemas respiratorios. La nariz estaba obstruída, ya sea en verano o en invierno. A menudo, yo padecía de fuertes dolores, en la zona frontal. Terapias a base de penicilina, hierbas suecas, spray nasal y acupuntura, lograban un alivio parcial, sin poder eliminar de manera permanente la afección.
Más o menos, después de un mes de la introducción a las enseñanzas de Bruno Gröning, en abril de 1990, mis ojos y mi nariz empezaron a gotear, de forma inusitada, durante dos días. Este procedimiento se desarrolló sin dolor alguno. Transcurridos esos dos días, mi nariz estaba completamente libre y, desde junio de 1990, yo puedo respirar libremente, ya sea de día como de noche.
Curación del daño de los senos frontales
K.S. sobre su hija S. (14) Eupen (Bélgica)
A partir de su cuarto año de vida, mi hija, sufría, de 5 a 8 veces por año, de una supuración de los senos frontales. Ella sufría de dolores de cabeza intermitentes, en la zona por encima de los ojos. Durante la noche se despertaba cada media hora, más o menos. El pediatra, le recetó diversos medicamentos (spray nasal, antibióticos, Bisolvon para inhalaciones), medicamentos que ella tenía que tomar durante una semana. Después de 3 - 4 días, la mucosidad (pituita) se desprendía, los dolores se reducían pero, al transcurrir algunas semanas, todo empezaba de nuevo.
En el mes de agosto de 1991, juntamente con mi hija, aprendimos las enseñanzas de Bruno Gröning. Durante los primeros días, después de la introducción a las enseñanzas de Bruno Gröning, de la nariz le salían pus y sangre. Los dolores de cabeza y la inflamación de los ojos desaparecieron enseguida. Así ella obtuvo su curación. Durante la noche, ella puede dormir normalmente y no ha padecido de ninguna otra inflamación de los senos frontales.
